Jueves, 11 de diciembre de 2014.
Dictado - copiado.
Todos, sentados en sus butacas y calladitos, se han abrochado los cinturones. Enseguida, una azafata ha venido, a ayudar a Marta.
El soldadito de plomo tenía muy mala suerte. Casi nadie le ayudaba. Habría necesitado mucha más ayuda.
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